Queridos alumnos
y amigos de casaAbhyasa – ashtanga yoga barcelona,
Sólo quería
haceros saber que me alejo de la enseñanza activa en el Shala y de
sus asuntos diarios.
He estado
contemplando esta posibilidad durante el último año, observando y
meditándolo, intentando no tomar decisiones rápidas o precipitadas,
ya que me siento muy responsable del Shala y de todos vosotros, como
practicantes, estudiantes, y amigos, interesados en continuar con la
práctica de ashtanga yoga y en recibir enseñanzas.
El momento ha
llegado. Las circunstancias son propicias y con suerte la transición
será tranquila y amable, causando pocas molestias.
Muchos de
vosotros ya conocéis a Aleix Griñó Rios, quién ha estado
enseñando en el Shala desde marzo de 2010 hasta marzo de 2012, y
quién fue también asistente de mis clases durante 6 meses en el año
2008 cuando yo aún estaba enseñando un programa sencillo de
estilo-Mysore sólo por las mañanas. Él dirigirá el Shala y estará
enseñando desde el 1 de junio. Verónica Fernández, quién ha sido
parte del Shala desde que está abierto, primero como asistente y
ahora como profesora, continuará enseñando, lo que hará aún más
estable la transición. Tengo la más alta confianza y la certeza de
que el Shala continuará con la misma visión, atención, cuidado y
dedicación tal como ha sido durante todos estos años.
Mi visión al
iniciar y hacer florecer el Shala fue crear una comunidad y un
espacio en el cual las personas puedan venir, aprender y practicar
Ashtanga Yoga, como un proceso transformador, de sanación, de
desarrollo personal y de auto investigación. Esta es una práctica
que ha cambiado profundamente mi vida. Desde que la he descubierto,
ha sido siempre una brújula, guiándome a través de los años en
que practicaba en Nueva York e India y luego enseñando en diferentes
países y finalmente aquí en Barcelona. Abrí el Shala en septiembre
de 2009, poco después de la muerte de Guruji (Sri K. Pattabhi Jois),
muy inspirada e influenciada por la insistencia y el apoyo de Sharath
(nieto de Guruji, quién continúa las enseñanzas en el Shala de
Mysore, India) para que comparta la práctica y enseñanzas del modo
más puro y tradicional, tal como ha estado enseñado y tal como he
aprendido de ellos los últimos 14 años. Y esta ha sido siempre mi
prioridad: crear un espacio donde se enseñe siguiendo la tradición
de Mysore, y crear un refugio, un lugar sagrado, en el caos de la
ciudad, al cual pueda uno llegar y conectar intensamente consigo
mismo a través de la respiración y la práctica de Ashtanga Yoga,
creando un sentido de bienestar, paz interior y armonía.
Crear el Shala
fue una evolución natural luego de haber estado enseñando yoga
durante muchos años, pero entendí pronto que enseñar yoga y
dirigir un Shala, especialmente en un país, cultura y lenguaje que
no son los míos propios, son cosas realmente distintas. Esto ha
evidenciado que mi pasión consiste en enseñar y compartir esta
práctica y no en dirigir un Shala y todo lo que ello conlleva. Por
eso he decidido alejarme de sus asuntos cotidianos. Y confío
plenamente en las manos capaces de Aleix y Vero.
Me gustaría
expresar mi inmensa gratitud a todos vosotros por ser parte de esta
experiencia. El Shala no hubiera existido sin vuestra constante
dedicación a la práctica y las enseñanzas. Ha sido una experiencia
muy enriquecedora y satisfactoria compartir el Ashtanga Yoga con
todos vosotros y ver a cada uno de vosotros en su propio camino
personal de crecimiento, conocimiento y curación. Gracias por
dejarme acompañaros en este trayecto. Os deseo todo lo mejor en
vuestra evolución y transformación. Recordad que la práctica es
una herramienta para cultivar y conectar con vuestra paz interior,
armonía, alegría y bienestar. Tratad de no quedar perdidos en la
forma externa, o atrapados en las asanas, las cuales son sólo una
parte de las 8 ramas que conforman el camino. Recordad que yoga es un
camino hacia el interior para abrir el corazón y conectar con la
conciencia pura.
Por el momento no tengo planes. Por eso voy a estar en Barcelona durante junio y lo más probable es que julio también. Después de esto seguramente realice un viaje y estoy deseosa de ser sólo una practicante otra vez y explorar y crecer en mi propio camino espiritual.
Les deseo a todos
y cada uno de vosotros lo mejor en vuestras vidas… que las llenéis
de alegría, amor, contento, paz y bienestar. Yo he disfrutado
plenamente conectando con cada uno de vosotros y trabajando con
vosotros en vuestra práctica. Ha sido una hermosa y enriquecedora
experiencia y todo lo que puedo decir es: ¡gracias! Con mucho amor y
gratitud… namaste. hojung
